miércoles, 15 de julio de 2015

Adiós al Pañal

Una noche,
 antes de las fiestas de Navidad, 
al irnos a la cama, 
ponernos el pijama y un nuevo pañal,
 Ania me dijo:
-MAMA, NO ME PONGAS EL PAÑAL.



Me dejó descolocada, 
no sabia si era un juego,
 como reaccionar,
 si seguirla o no el juego 
y claro que se lo seguí. 



Mientras jugaba un ratito más en la cama me puse sin pensar a buscar por Internet todo articulo relacionado con el tema de dejar el pañal.

En la guardería de Ania había varios niños que ya no llevaban el pañal y la profesora estaba trabajando con ellos para que todo fuese un éxito. Me había comentado que Ania sería de las siguientes por que la veía preparada y madura para ello. Pero de ahí a que fuese ella quien lo decidiese, me hizo sentirme supero orgullosa de ella.

Total, que dicho y echo, sin pensar y tener nada planeado, en pleno invierno y a lo loco. Como acostumbro ha hacer las cosas, mi hija igual, sin pensar...
 (no creo que sea la mejor manera, pero así somos)

Al día siguiente, Sábado, baje a comprar bragitas, camisetas interiores y un orinalito que ella llegase bien por que estábamos usando el de los muñecos.




De todos los artículos que leí, cogí las premisas que a mi me gustaron, como siempre.

- Si se lo quito se lo quito de golpe, noche y día. 


- Si tomamos la decisión, vamos a delante sin dudar, a no ser que consideremos que ha sido pronto y no esta preparada, que no fue la ocasión. Tampoco voy a ser cabezona si no era el momento.


- Quitarle la ropita durante un par de días. Que ande de cintura para abajo desnuda.

Era invierno, pero teníamos la calefacción. Coger la fregona y por esos días hacerte amiga de ella. Mucha paciencia y constancia.
Las primeras veces se escapó en el suelo.... luego salia corriendo y se sentaba en el orinalito que compramos.
Lo íbamos moviendo según nos movíamos de habitación, por que sino se nos escapaba, pero al ir corriendo en busca de el.... ya tendríamos tiempo para aguantar los esfínteres, ahora estábamos aprendido a ir a sentarnos.

- Al pasar unos días desnuda por casa, podíamos salir a la calle. Antes de salir de casa sentarnos al wc y salir un ratito a la calle pero no mucho tiempo, media hora. Para evitar malas experiencias...  mejor que todo sean buenas experiencias y recuerdos de su transito al wc. Al siguiente día salir un poquito más y así ir graduando el tiempo de salidas.
Me pareció lógico, en las salidas, ofrecer ir al wc conmigo, por que yo tenía ganas, aun que fuese mentirijillas, para recordarselo. No esperar a que ella lo pidiera, por que seria demasiado tarde.

- A la hora de vestirla para salir a la calle, usar ropa ancha, facil de bajar, las bragas un poco sueltas, por que si siguen notando las costuras al rededor de sus piernas, tienen la sensación de que todavía llevan puesto el pañal, y es más fácil que tengan escapes.

-Con el pijama no le he puesto bragitas.

-Por las noches me puse el despertador a una hora. Los primeros días noté que la cama empezaba a estar húmeda estando yo dormida, como dormimos juntos enseguida lo notaba. Y más o menos tenía un patrón de hora. Así que nos levantábamos, la sentaba aun así en el wc mientras los papas cambiábamos sábanas.
Opté por poner aún así una toalla debajo de Ania y al día siguiente comprar unos empapadores desechables para estos momentos.
Al principio la puse a las tres de la madrugada, De dormida la despertaba y la ponía al wc.
(NO DIGO QUE ESTO SEA LO MEJOR, PERO A MI ME FUNCIONÓ) Dejó de manchar los empapadores desde el primer día.
Luego lo retrasé a las 4 de la madrugada, luego a las 5, hasta que a las dos semanas. NO EXAGERO, dejé de ponerlo, Había noches que se despertaba ella sola y me lo pedía y había noches que las pasábamos enteras y así hasta ahora. Hay días que se despierta para hacer pis a media noche y hay días que no. Pero siempre vamos al wc.

-Para la siestas... hacíamos pis antes y después. Lo más normal era que al despertarse se lo hacía por que no le daba tiempo, de lo dormida que seguía, a darse cuenta de la situación, ya estaba despierta y quería hacer pis,. Cuando me di cuenta de lo que pasaba todos los días, en cuanto se despertaba la sentaba directamente en el wc. lo hacía y se acabó el problema. (Tiene un costoso despertar)

Al principio usamos el orinalito de suelo para que ella estuviera más a gusto. Luego compramos un adaptador de wc de adultos blandito y la ayudamos a subir cuando lo pide y la acompañábamos en todo el proceso de pis.
La siguiente inversión fue un peldaño para que ella llegase sola al wc de los papas. Pero le seguía quedando alto y lo usaba para poder llegar al interruptor de la luz solita.

En un mes todo estaba regularizado y como ahora.

Bueno, ahora, ella sola quiere encender la luz del baño y mueve el peldaño para subirse sola al wc.
Quiere limpiarse sola, que por cierto lo hace muy bien, sabe que hasta que no sale limpito el papel no hay que dejar de limpiar.
Ella sola tira de la cadena.
Ella sola se lava las mano.
Las ultimas veces ella ha ido ya sola, sin supervisar todo el proceso.

NO pensé que fuese a ir todo tan bien. Tan buenas experiencias.



Tengo en la familia niños más mayores que Ania que aún tienen pañales por la noche, o incluso toman pastillas para regular los esfinteres... cada niño es un mundo y cada caso es otra cosa.
YO solo os cuento mi experiencia personal.



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